La integración de la comunicación y la tecnología en los procesos fue fundamental en el contexto de las limitaciones de movilidad (Covid-19, manifestaciones nacionales). La empresa Equiori, perteneciente al grupo Pakka y que comercializa cacao, por ejemplo, pudo continuar las operaciones y aumentar la organización y la trazabilidad a través de herramientas como Google Suite y la aplicación smartfarm. Todos los socios del consorcio podrían mitigar esos desafíos transfiriendo habilidades técnicas y de gestión a los socios locales
Uno de los principales hitos fue el reconocimiento de los socios del proyecto de que la colaboración interinstitucional entre empresas y organizaciones con objetivos de impacto similares y con experiencia en áreas que pueden complementarse entre sí es una estrategia que aumenta las posibilidades de éxito, facilita la interacción con diferentes actores de la cadena y genera visibilidad a nivel institucional.
Como aprendizaje principal de las intervenciones del proyecto se vio la necesidad de contar con estrategias integrales para el desarrollo de las comunidades rurales en Colombia. Los socios del proyecto reconocen que es necesario considerar todo el contexto productivo de una organización de productores e incluir otros cultivos e ingresos para garantizar un ingreso digno.
La emergencia climática también nos hizo pensar cada vez más en soluciones que van más allá de las cadenas de suministro individuales para construir medios de vida más resilientes y adaptarse al cambio climático. Por lo tanto, ya comenzamos a evaluar posibles intervenciones piloto en paisajes de abastecimiento sostenible y en esquemas de compensación y neutralización de carbono.