La creación de "La Rolita", el primer operador de transporte público de la ciudad, es el resultado del esfuerzo por revolucionar el transporte urbano con visión de sostenibilidad y género. Con una flota de 195 buses eléctricos y el 60% de conductoras mujeres, La Rolita atiende áreas en donde el transporte no llegaba unos años antes. Esta iniciativa ha beneficiado a más de 35 mil usuarios en zonas clave como Perdomo, la zona industrial y Fontibón.
Un servicio de movilidad con enfoque innovador que combina la electrificación del transporte con consideraciones de género, transformando el panorama socioambiental del transporte público en Latinoamérica
Este ejemplo de innovación es digno de ser replicado en otras ciudades de América Latina y es por eso que el marco de la Conferencia Regional de Transporte Público Cero Emisiones organizada por CALAC+, representantes de México, Chile, Perú, Noruega, entre otros, pudieron conocer la experiencia de "La Rolita".
Bogotá ahora cuenta con una flota impresionante de 1,485 buses eléctricos, consolidándola como poseedora de la segunda flota de buses de batería más grande del mundo fuera de China. Dentro de esta flota, La Rolita destaca con sus 195 buses, mostrando un compromiso notable con la igualdad de género en un sector históricamente dominado por hombres.
La Rolita ha alcanzado un hito al generar capacidades y ofrecer pruebas de conducción a nuevas conductoras, desde el proceso inicial de obtención de licencias de conducción C2 hasta la operación en las rutas operativas del Sistema Integrado de Transporte Público - SITP de la ciudad. Este enfoque refleja un compromiso firme con la equidad de género y la inclusión en el sector del transporte público.
La Rolita envía un mensaje claro de inclusividad y equidad de género: con una plantilla de 600 personas empleadas, 472 conducen autobuses y el 60% son mujeres.
Iniciativas como La Rolita no solo promueven la sostenibilidad ambiental, sino que también impulsa la igualdad de oportunidades en el ámbito laboral, demostrando que la innovación y la igualdad de género pueden ir de la mano en la transformación del transporte público.
Ejemplos como este son los que el programa CALAC+, implementado por Swisscontact y financiado por la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación (COSUDE), apunta a promover en otros países de la región.